ENCONTRADA UNA EXTRAÑA ESPECIE DE MOSCA EN VIVER.
Autor: Paco Mas
Fecha: marzo de 2025
En el año 2020 se encontraron en los Ojos del Prao un conjunto de larvas de moscas, extrañas no por su forma, sino por su comportamiento, ya que avanzaban en grupos numerosos, similares de algún modo a la conocida procesionaria del pino. El localizador (Paco Mas) se puso en contacto con un experto en dípteros (moscas y similares) de España, quien manifestó un alto interés, ya que dicho grupo no había sido citado todavía en España, ya no la especie, que podría ser incluso nueva, sino la familia Sciaridae. Dada la forma de desplazarse, estas larvas son vulgarmente conocidas como “gusanos soldado”, siendo bien conocidas en zonas del centro y norte de Europa. Los ejemplares observados han sido reconocidos supuestamente como un cúmulo de pequeños gusanos o larvas de dípteros de la familia Sciaridae, que en su conjunto medían unos 20 cm de largo y que se mueven juntas y al unísono con rumbo en apariencia errático. Apenas se sabe nada de su biología, aunque se piensa que se alimentan de restos orgánicos, como tantos otros dípteros.
A partir de ese momento se buscaron más larvas, recolectándose algunas para su estudio. Incluso se criaron y consiguieron abundantes ejemplares de adultos. Todo este material fue enviado al experto español Miguel Carles-Tolrá, quien a su vez lo enviaría a expertos en ese grupo de dípteros de Alemania, para su estudio morfológico y secuenciación de ADN.
Asimismo, debido a la trascendencia entomológica y rareza del hallazgo, se publicó un artículo de la observación en el Boletín de la Sociedad Entomológica Aragonesa (S.E.A.), el cual se puede consultar en el siguiente enlace, donde hay diversas fotos de las larvas:
https://drive.google.com/file/d/1wHsTS7AKvIan6NTAh7yAnd1_zrM-jMz6/view?usp=sharing
Actualmente se está estudiando el ADN de las larvas y adultos, proceso que conlleva mucho tiempo. También se están analizando morfológicamente individuos adultos machos (en muchos artrópodos es necesario analizar la genitalia de los machos para distinguir especies, debido a la similitud de las especies en su morfología). Todo parece indicar que se trata de una nueva especie, todavía en proceso de catalogación, pero que se ha localizado asimismo en otras zonas de la Península Ibérica, e incluso tal vez en Marruecos. En cualquier caso, los especímenes encontrados en Viver son los que están en mejor estado, y llegado el caso, se depositarían en un museo de ciencias naturales para su identificación como holotipo (ejemplar que es el citado como referencia universal de la nueva especie o portanombre). En cualquier caso, se considera un hallazgo muy interesante y probablemente otra especie de “sciáridos” con larvas que avanzan en procesión hasta ahora desconocidos o sin catalogar.
En el caso probable de que estas observaciones en diversas zonas y alejadas respondieran a la misma especie o subespecie, estaríamos frente a poblaciones ya separadas, que en algún otro momento muy lejano (miles o millones de años) y en otras condiciones muy diferentes del paisaje, pudieron habitar lugares con ecosistemas entonces similares, que permitieron una dispersión de aquellas antiguas poblaciones. Para hacerse una idea, podríamos estar hablando del momento en que se estaban formando y elevando montañas como los Pirineos, los Alpes, el Sistema Bético y el Sistema Ibérico (en el cual nos encontramos); o sea, un paisaje y condiciones ambientales totalmente diferentes. En realidad la frase anterior es en parte incorrecta: las montañas citadas siguen formándose en la actualidad, debido al empuje de la placa continental africana sobre la europea, en un proceso complejo de plegamiento y elevación, y al mismo tiempo erosión continua.
Desde ese año se ha vuelto en diversas ocasiones a intentar hacer nuevas observaciones, todas sin éxito. Un factor podría ser que no se han vuelto a dar las circunstancias de humedad de aquella primavera, que bien ocasionasen eclosiones masivas, o que permitiesen una mayor dispersión de las larvas. También podría ser que tuvieran eclosiones en diferentes fechas, o más de un ciclo anual. Hay que considerar que se sabe bien poco de estos grupos de animales, salvo de un par de especies que causan algunos problemas en invernaderos (no son para nada la que hay en los Ojos). Tan solo se sabe que los adultos (moscas pequeñas) viven poco y tienen escasa capacidad de vuelo, y por tanto de dispersión, y que las larvas se alimentan de hongos, musgo y material orgánico en descomposición, por lo que es evidente que críen en un lugar como los Ojos del Prao.
Cuando se tengan resultados concretos, se hará un nuevo artículo al respecto.
Grupo de larvas de moscas avanzando en conjunto |
Procesión de larvas y referencia de tamaño |
Camino donde se encontraron, en los Ojos del Prao. Fuera del camino debía haber más grupos, pero es muy difícil su observación |