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lunes, 22 de julio de 2024

REFUGIOS DEL CERRO DE MORREDONDO, VIVER.


Reseña de junio de 2024.

Localidad: Viver.


Situación:

Con esta reseña del Cerro de Morredondo llegamos al extremo más occidental del Frente en el término municipal de Viver, y dentro del mismo de la tan famosa Línea defensiva republicana XYZ.

Es este cerro, como decimos, el último en la dirección este-oeste de Viver con tropas constitucionales, en continuación con las inmediatas anteriores, estando, por ejemplo, del punto más alto y al oeste del anterior conjunto de Puntalico-Infantes a unos novecientos metros aproximadamente, separados por sendas vaguadas, al norte la Hoya Almer, y al sursuroeste el Barranco del Reguero. Entre ambos conjuntos bélicos, o puntos Altos, discurre la Vía Pecuaria “Cañada de Benabal”.

Este monte se conoce con este nombre por su característica forma cónica regular, casi perfecta, o sea, una elevación prácticamente redonda que asciende de manera uniforme menguando su circunferencia hasta una cima casi en punta, de apenas unos seis o siete metros de diámetro. Así del término “monte redondo” por su morfología, se apocopa su topónimo en “Morredondo”.

Dadas sus circunstancias y características especiales es muy conocido en Viver, dando nombre, además, a toda una extensa partida de terreno rústico, a una famosa fuente próxima, a la Masía que se instaló en las inmediaciones de la fuente, que también propicia el nombre del riego por donde discurren sus aguas, y del barranco adonde van sus sobrantes, todo ello en el término de Viver.

A los pies de sus faldas norte y noreste circula la carretera CV-236 de Viver a Torás, por donde se cruza con el mencionado Barranco de Morredondo; por el este, como ya dijimos, se separa del Alto de los Infantes-Puntalico por la loma del Corral del Chullo en el discurso de la Cañada de Benabal; la vertiente sur desciende hasta el Barranco del Reguero; y por el oeste, la vaguada donde se inicia el Barranco del Reguero a partir de la mencionada CV-236, y el límite del término de Viver en su linde con el de Torás.

Este cerro de Morredondo es un montículo con una altitud en la cima de unos 788 msnm., y si tomamos como base del mismo el lugar donde se cruzan las citada carretera de Torás y el barranco de Morredondo, que está por debajo de los 710 msnm, podemos manifestar que tiene aproximadamente unos 80 metros de altura. Dado que en línea recta entre los dos puntos mencionados dista unos 300 metros, nos haremos una idea aproximada de que sus faldas, al menos en esta vertiente noreste, arrojan unos porcentajes de desnivel en torno al 26%.

En cuanto a su composición, los suelos de todo el cerro son una combinación de arcillas, margas y rocas arenosas, con un pequeño punto de roca caliza en la misma cumbre. Estos terrenos blandos son propicios a la erosión, acentuada por los abancalamientos en su parte media hacia abajo, después por la plantación de pinos en los años 50-60 del pasado siglo que cubrió todo el monte, y ahora por los efectos del incendio forestal de 2022, que extrañamente no han sido talados quedando en pie todos los pinos quemados, salvo los caídos por su propio peso. 

Además de sus características geológicas indicadas, nos llamó la atención y por eso simplemente queremos hacerlo constar, aunque de forma muy leve y poco científica, que en las inmediaciones del Cerro, en los extremos este y oeste próximo a sus bases, en sendos bancales cultivados, descubrimos diversas y numerosas rocas de carácter ígneo (origen volcánico) y que se conocen como ofitas, aunque sobre este tema de la Geología es harto difícil asegurar nada, no por nosotros, sino incluso por los propios científicos. Lo que sí nos resultó curioso fue descubrir este tipo de “piedras” en lados opuestos del monte, y además con la circunstancia de que es el único sitio en el término de Viver que las hemos visto (lo que tampoco quiere decir que no las haya), aunque en el término de Torás sí hay otros afloramientos. Pero bueno, la aproximación a la Geología del término de Viver, es “harina de otro costal”, únicamente queremos que quede como un mero apunte.

En cuanto al tema bélico es reseñable, y lo haremos más extensamente a continuación en su epígrafe correspondiente, que es un cerro desde donde se puede tener buena posición, y por ello todo él está rodeado por una trinchera circular, fluctuando a una distancia de entre unos diez y treinta metros por debajo de la cima. En la misma existen varios refugios y puestos de tiro en todas direcciones, incluso hacia el sur. También se pueden observar otros tramos dispersos de trincheras. Una gran parte de las trincheras y casi todos los refugios se encuentran en mal estado, lo que se puede considerar normal debido a las circunstancias que hemos comentado en un párrafo anterior.

También es de advertir que una buena parte de las tierras que se hallan al otro lado de la citada CV-236 en dirección norte, donde están las también mencionadas Fuente y Masía de Morredondo, y hasta el Barranco del Espino por el norte, y hasta casi el cruce con la Carretera de Teresa CV-235, son todas ellas conocidas popularmente por la gente de Viver como la partida de Morredondo, aunque oficialmente tienen otros nombres propios de las respectivas partidas, por lo que podemos decir que el topónimo “Morredondo” da nombre a lo que llamamos una “macropartida” en el término de Viver. Toda esa franja de terrenos en el final de la Guerra era de dominio franquista, y en la que también reseñaremos algunos escasos refugios y demás elementos bélicos en otra reseña separada.


Descripción de los refugios:

La situación de los elementos bélicos del Cerro de Morredondo es bastante lógica: básicamente se trata de una trinchera circular que rodea todo el cerro a media altura, la cual se encuentra en una zona en mal estado, pero en la parte sur está todavía en relativo buen estado de conservación. Del extremo de la parte sur sale otro tramo de trinchera, ya en peor estado y a tramos desaparecida, que va cortando la ladera en dirección a la vaguada que forma la parte alta del Reguero del Tosco. Esta parte protegería toda la vaguada situada entre el Cerro de Morredondo y el contiguo Cerro de la Hinojosa o de la Cueva, ya en Torás, y continuación de la línea del frente republicano. Añadir que el Cerro de la Hinojosa también dispone de unas trincheras circulares con diversos refugios. Es de suponer que habría otra trinchera que fuese hacia el este, a cubrir la loma que discurre entre las partidas de la Hoya Almer y el Corral del Chullo, en dirección a los Infantes.

A lo largo de las trincheras hemos localizado un total de 12 refugios, casi todos ellos colmatados o ya cegados. Solo hemos podido entrar en dos de ellos, los numerados como 4 y 5, los cuales describimos y adjuntamos su topografía. También hay, a lo largo de las trincheras, vestigios de diversos puestos de tiro.

En cuanto a la cumbre, la cual en su día debía estar totalmente despejada (así como todas las laderas del cerro), no hay ningún elemento, tal vez por ser un punto muy desprotegido. Es un pequeño afloramiento de calizas, donde se aprecian indicios de lo que tal vez fuera un puesto de tiro o de observación.

El refugio nº 4 tiene la típica forma de “h”, si bien la galería principal es más larga de lo habitual. Una de las bocas está casi cegada, y la otra, de 1 x 0,50 metros permite entrar arrastrándose. Ya dentro, las galerías alcanzan un total de 36 metros de recorrido (la galería principal mide 22 metros y se dirige hacia el interior de la montaña, como queriendo buscar el lado contrario, pero tal vez en algún momento se abandonó la idea y se dejó de excavar). La anchura media es de 1 metro, si bien es algo más ancho en algunos tramos. La altura va de 0,50 a 1,50 metros. Excavado en rocas arenosas y arcillas.
Coordenadas R4: 30 S 700456 4422302   768 msnm    N39.92711 W0.65424

El refugio nº 5 tiene también dos bocas, y va desde la trinchera hacia la parte inferior de la ladera, tal vez a algún puesto de tiro. La boca inferior está medio colmatada, pero la superior es accesible, midiendo 1 x 0,80 metros. La galería, en forma de zigzag, se recorre bien, midiendo un total de unos 13 metros de larga, con un ancho de cerca de 1 metro, aunque más amplia en una pequeña sala cerca de la otra boca, y una altura media de 1,5 metros. Excavado en rocas margosas y también algo en conglomerados.
Coordenadas R5: 30 S 700457 4422284   767 msnm    N39.92695 W0.65424

 


 Documentado por Pepe Juesas y Paco Mas.

 

 

Vistas de los puestos del Puntalico-Infantes y del cerro Morredondo desde uno de los puestos del alto del Niño

Vistas del cerro de Morredondo desde una de las posiciones primeras del bando fascista, situada en un pequeño cerro en plena partida de Morredondo

Primer plano del cerro de Morredondo, con todo el pinar quemado por el incendio de 2022

Tramo de trinchera en aceptable estado de conservación

Boca casi tapada del refugio nº 2

Bocas e interior del refugio nº 4


Interior del refugio nº 5


domingo, 14 de julio de 2024

CUEVA DEL TÚNEL, NAVAJAS

REVISIÓN DE LA CUEVA DEL TÚNEL.

Entre los meses de abril y julio de 2024 se ha procedido a realizar una revisión de la Cueva del Túnel, que ha consistido en realizar la topografía de sus diferentes galerías, observar sus morfologías y valorar sus posibles continuaciones. Con los trabajos ahora terminados, se esta preparando un trabajo sobre la cavidad para poner de relieve sus formas hipogénicas y presentar su topografía completa. En estas entradas se han explorado nuevas galerías que suponen cerca de 300 metros nuevos, que sumados a las galerías exploradas años atrás totalizan a día de hoy un recorrido de 1.044 metros.

Estos trabajos han sido impulsados por Jesús Almela (ECC), contando con la colaboración de Paco Mas (GESAP) y Paco Muñoz (GESAP).

Recordemos que esta cavidad fue abierta tras las obras del túnel del ferrocarril de Ojos Negros a principios del siglo XX y de una cantera cercana. Desde la década de 1970 se han ido descubriendo diferentes galerías hasta la actualidad, que ha superado el desarrollo de 1 km y un desnivel de alrededor de 40 metros.

Se puede consultar la referencia en:

http://cavitats-subterranies.blogspot.com/2024/07/la-cueva-del-tunel-navajas-1-km.html

 



 

jueves, 27 de junio de 2024

REFUGIOS EL PUNTALICO-INFANTES, VIVER.


Reseña de junio de 2024.

Localidad: Viver.


Situación:

En continuidad con la línea defensiva XYZ, tantas veces nombrada, dentro del término de Viver, y tras la anterior reseña de La Chana, hemos de referirnos ahora a la zona del Puntalico y los Infantes que son las posiciones inmediatas, en la dirección este-oeste de aquélla.

Estas dos partidas yuxtapuestas forman, físicamente, otra elevación entre los altos de la Chana (junto con La Clapiza y el Cuarto Royo) y de Morredondo, al que nos referiremos en la siguiente reseña. Su cima, que está sobre los 730 metros de altitud en su parte más alta, es relativamente extensa y llana, con poca vegetación y suelo de la tan característica “clapiza”. Las vertientes, con suelos más mezclados aunque predominan los arenosos y arcillosos, recaen en su conjunto: por el este a la carretera de Teresa CV-2352; por el norte hacia la de Torás CV-236, tendiendo por medio en su parte baja hasta la propia carretera, terreno cultivado que se integra en una hoya que se conoce como la Hoya Almer; por el oeste cae al Camino que desciende al Barranco del Reguero y el Corral del Chullo, así como también el resto de cultivos en la Hoya Almer, a los pies del siguiente cerro, el citado de Morredondo; y por el sur, vierte a otra Hoya conocida como la de los Infantes o Malvive, así como hacia el barranco de la Zorrera.

Complementa la descripción que los sectores norte y este constituyen el denominado Puntalico, el cual contiene dos significativos salientes en sus extremos. El más oriental domina perfectamente el curso de las dos carreteras citadas en sus tramos iniciales tras el cruce que las divide, y el situado en el lado opuesto más occidental lo hace respecto a la de Torás en toda una amplia recta. Las partes llanas de la cima, hacia el sur y oeste, y sus respectivas faldas, son lo que conocemos como Los Infantes, con su Alto de los Infantes, obviamente en la parta más alta del elevado llano.

Dadas las características que hemos descrito de este enclave, podemos concluir que el tramo del Puntalico constituyó primera línea del Frente, donde a lo largo de sus faldas se ubicaban varias trincheras en al menos dos niveles, con varios puestos de tiro y refugios a lo largo de las mismas.

En la porción de Los Infantes caben distinguir dos secciones: una en el llano, de suelo pedregoso tipo “clapiza”, donde apenas presenta elementos bélicos, y otra en las laderas sur y oeste, que albergaban otras posiciones defensivas y de retaguardia, con algunos pocos refugios más y puestos de tiro, conectados por una larga línea de trincheras.

A destacar también que en esa parte sur se encuentran las Cuevas de los Infantes, que a buen seguro fueron usadas como refugios de guerra, a la vez que hasta la actualidad, algunas de ellas, lo han sido durante muchos años como corral temporal de ganado por una explotación familiar de Viver.

Como vemos, este espacio de Puntalico-Infantes fue otro importante conjunto bélico de la línea defensiva en Viver, que en el aspecto militar probablemente se corresponde con la fortificación “Q-2” que Ramón Juan en su libro “Resistir es vencer” sitúa al oeste de la “Zona de las T” dentro del “área nº 1 de influencia geográfica de las fortificaciones” del bando constitucional.

Además, reiterando lo que dijimos en la anterior reseña de La Chana, nos podemos aventurar a señalar que el Conjunto integrado por aquél y este de El Puntalico-Infantes, e incluso Morredondo, que trataremos a continuación, eran las avanzadas del puesto de supervisión más fortificado que hemos descrito en el epígrafe Refugio del Sabinar.

Otra curiosidad a resaltar es que hace bastantes años, posteriormente a la Guerra Civil, en esta zona se hicieron varias prospecciones con objeto de establecer minas de arcillas, llegando a excavar en tres sitios distintos. Aunque luego fue desestimada su explotación, todavía hoy se aprecian ostensiblemente los restos de las actuaciones, permaneciendo los respectivos agujeros y montones de tierra y piedras a la vista, que alteran un tanto el orden del paisaje natural.

Finalizamos esta descripción y situación general diciendo que una buena parte de los elementos que aquí tratamos han perdido continuidad y visibilidad, algunos apenas son vestigios, por su mal estado debido a numerosas circunstancias, como son la clase de suelo arcilloso y margoso que propicia la erosión, las mencionadas actuaciones de las minas que cortan las líneas de trincheras, la transformación en suelo agrícola, la plantaciones de pinos hace más de 50 años, y las más recientes como el incendio forestal del 2022 y sus posteriores actuaciones de talas y arrastre de troncos quemados.

 


Descripción de los refugios:

A lo largo de las trincheras hemos localizado un total de 54 bocas de refugios, casi todos ellos colmatados. Tan solo en 6 de ellos se puede entrar. Uno de ellos era además un nido de ametralladoras, pues presenta unos restos de muros laterales. También hay varios restos de casetas y por supuesto muchos pequeños puestos de tiro.

De los 6 refugios accesibles, los numerados como 13 y 29 son de pequeño tamaño, teniendo una galería de unos 3 metros de larga, con un ancho inicial de 1 metro, al fondo alcanza algo más de 2 metros, y la altura es de 1 metro. El numerado como 50, situado en un foso de una trinchera, mide también unos 3 metros de profundo, con 1 x 1 metros de sección, pero todo indica que tenía otra salida más abajo.
Coordenadas R13: 30 S 701803 4422036   700 msnm   N39.92440 W0.63857
Coordenadas R29: 30 S 701227 4422230   712 msnm   N39.92628 W0.64525
Coordenadas R50: 30 S 701032 4421572   731 msnm   N39.92041 W0.64773

El refugio nº 14 era uno con dos entradas, pero la otra (nº 15) está cegada. La boca de 0,70 x 0,60 metros da acceso a una galería en descenso, que al poco gira a la derecha, habiendo una sala algo más amplia dentro, donde se aprecia el indicio de la otra boca cegada. Es usado como madriguera. Las galerías miden un total de 11 metros, siendo la anchura de 0,60 a 3 metros, y la altura de 0,60 a 1,50 metros.
Coordenadas R14: 30 S 701176 4421958   740 msnm   N39.92384 W0.64593

El refugio nº 26 tiene una única boca, de 1 x 0,50 metros, que da acceso a una galería que gira y luego avanza en diagonal. Mide un total de 9 metros, con una anchura de 1 metro y una altura de 0,50 a 0,70 metros.
Coordenadas R26: 30 S 701256 4422220   713 msnm   N39.92618 W0.64491

El refugio nº 41 era un nido de ametralladoras, con un refugio interior, que parece ir a buscar alguno de los superiores, pero que parece no se llegó a conectar. El recinto inicial, de 2 x 2 metros y abierto, tiene restos de muros laterales. Al fondo y hacia un lado se abre el refugio que hace un codo hacia la izquierda. Mide un total de 7 metros, con un ancho de 1 metro y una altura inicial de 0,40 metros, pero luego baja aun más. Esa parte final no es accesible, y por tanto no se sabe si podía conectar, en su día, con otro de los superiores situados en la trinchera, como por ejemplo el nº 30, que está colmatado.
Coordenadas R41: 30 S 701233 4422244   705 msnm   N39.92640 W0.64517

 


Las Cuevas de los Infantes ya fueron documentadas en la ficha nº 512 del dosier de Cavidades, del Catálogo de Patrimonio de Viver, editado en el año 2017. Como hemos dicho, es seguro que fueron utilizadas como refugios, ya que protegen bien de modo natural, y están situadas en la contravertiente del Frente.

El conjunto de estas cuevas consta principalmente de dos zonas:

Una que fue utilizada como corral, y está cerrada por un vallado. Es un gran abrigo natural cubierto por las losas superiores, teniendo a su vez en su fondo varios covachos, los cuales posiblemente fueron acondicionados, dado su suelo bastante plano. El abrigo principal mide unos 35 metros de ancho, por unos 6 de hondo en su parte más amplia. Hay otro covacho algo separado, siendo el más grande de ellos el que mide unos 10 metros de ancho por casi 7 de hondo. Todo el recinto de muros mide sobre 60 metros de largo. La altura del abrigo es de unos 10 metros en su parte más alta, siendo la altura de los covachos internos algo escasa, de 1 a 2 metros. El corral fue abandonado hace pocos años, y tras el incendio de 2022 ha quedado bastante asolado, cayendo también una pequeña caseta que había dentro del recinto. Toda esta parte fue la que se topografió en 2017.

Y la otra, más al oeste, a unos 50 metros del extremo del vallado y tras una zona con bloques caídos, donde podemos encontrar cinco covachas más, también de origen natural, aunque sin duda, acondicionadas para su uso por personas o ganado. Esta zona estaba en 2017 cerrada por la maleza, y sólo se comentó su existencia, pero ahora es perfectamente accesible y hemos podido documentarlas. Cuatro de estas covachas tienen unas dimensiones medias de 4 metros de hondas, 2 a 5 metros de anchas, y alturas de 1 a 1,7 metros. Pero hay una más grande, la 4ª en sentido E-O, que dispone de 3 bocas con sus correspondientes salas. La profundidad máxima es de 5 metros, el largo total de 9 metros, y la altura de 0,8 a 1,2 metros; dos de estas salas se conectan entre sí a través de una estrecha ventana.

 


Estas cavidades se sitúan entre la capa de calizas superiores, que forman el típico suelo de “clapiza” de la zona alta, y las capas inferiores con arcillas y margas. Hay que añadir que en este caso, y al igual que en la zona de Peñas Rubias, las rocas calizas son una mezcla de calizas grises y de tobas calcáreas (“toscas”).

Coordenadas del conjunto principal: 30 S 701190 4421539  740 msnm  N39.92007 W0.64589
Coordenadas del covacho nº4:         30 S 701103 4421569  746 msnm  N39.92036 W0.64690


Documentado por Pepe Juesas y Paco Mas.
Colabora: Ramón Juan.

 

Vistas desde el Puntalico a otros puntos del Frente

Laderas del Puntalico

 
Boca del refugio nº 13

Interior del refugio nº 14

Penoso estado de las trincheras del Puntalico

Boca del refugio nº 26

 
Interior del refugio nº 26

Cuevas de los Infantes, conjunto principal

Covacho nº 4, dos de las bocas e interior


domingo, 2 de junio de 2024

REFUGIOS DE LA CHANA, VIVER.

Reseña de abril de 2024.

Localidad: Viver.


Situación:

La Chana es un sitio especial del término de Viver, cuyo topónimo es utilizado para referirse a varios elementos como la Fuente, la Partida, el Barranco, la Masía con sus dependencias como un Cubo de vino o un corral, y numerosos elementos bélicos de la Guerra Civil. De ellos el más importante, sin duda, es la Fuente que mana un agua muy popular y ampliamente utilizada, aunque sin clorar, por los habitantes de Viver y los de los pueblos vecinos. 

Sus aguas excedentes transcurren por una pequeña hoya conformando el corto Barranco que pronto desemboca en el de las Ramblillas, a pocos metros del Salto de las Peñas Rubias por donde vierte al Río Palancia.

En cuanto a la partida en sentido general, se le reconoce como una amplia zona de terreno que incluye, además de la partida de la Chana propiamente dicha, otras adyacentes como el Cuarto Royo, la Clapiza, el Sabinar, e incluso los Infantes y el Puntalico. 

Todo ello se puede ver con mayor amplitud y detalle en los diversos dosieres del conjunto del Catálogo de Patrimonio de Viver, en el siguiente enlace:  https://viver.es/patrimonio/

La situación de los refugios que vamos a tratar en este apartado se circunscriben al terreno que comprende las partidas de La Chana -incluyendo el Rincón de Puerta-, Clapiza y Cuarto Royo, que se encuentran al Oeste de la zona más o menos central del término. Está delimitado por las CV-2352 y CV-235 o carreteras vieja y nueva de Teresa, respectivamente, por el Norte; el Barranco de las Ramblillas que lo separa de las Peñas Rubias, por el Este; el Barranco de la Chana, por el Sur; y otra vez la CV-235 por el Oeste.

En el conjunto de numerosos refugios que denominamos de La Chana se distinguen dos grupos que se corresponden con las líneas del frente -en las vertientes Norte y Oeste-, y de la retaguardia -vertiente Sur-, del Cerro que conforman las mencionadas partidas de La Clapiza, parte de La Chana, y el Cuarto Royo.  

En la vertiente del Frente, o al Norte y Oeste, hacia la carretera CV-2352, como es normal, destacan muchos metros de trincheras, generalmente en mal estado, con bastantes puestos simples de tiro, más alguno fortificado, y un buen número de refugios excavados dentro de las trincheras, colmatados casi todos ellos.

En la vertiente Sur, o de Retaguardia, recayente al Barranco de la Chana y al Camino, antiguo de Viver a Teresa, observamos otro buen grupo de refugios excavados, que se sitúan a lo largo de todo este lugar de Este a Oeste, estando también en mal estado su mayoría, aunque algunos todavía son accesibles. Además encontramos abundantes restos de casetas, o más bien vestigios.

En el aspecto militar, este conjunto de La Chana corresponde, quizá, a la fortificación “Q-1” que Ramón Juan Navarro en su libro “Resistir es vencer” sitúa al Oeste de la “Zona de las T” dentro del “área nº 1 de influencia geográfica de las fortificaciones” en la reiterada línea defensiva XYZ del bando republicano. 

También nos podemos aventurar a señalar que el Conjunto integrado por este de La Chana, y los de El Puntalico e incluso Morredondo, que trataremos en los epígrafes siguientes, eran las avanzadas del puesto de supervisión más fortificado que hemos descrito en el epígrafe Refugio del Sabinar. 


Descripción de los refugios:

La zona de la Chana es un importante conjunto bélico de Viver, que contiene abundantes elementos, si bien la mayoría de ellos está en muy mal estado. Al deterioro por el paso de los años y por ser un terreno arcilloso propenso a la erosión, se suman las transformaciones agrarias y el devastador incendio del año 2022, con las posteriores acciones de talado y arrastre de madera.

El conjunto se distribuye por las partidas de la Chana, la Clapiza y el Cuarto Royo.

En un primer trabajo que hicimos de esta zona en el año 2017 (ficha nº 528 del dosier “Cavidades de Viver”) documentamos 58 bocas de refugios, además de un pequeño nido de ametralladoras, algunos restos de casetas y las trincheras. Ahora, con la nueva revisión, y contando con que el terreno despejado (por el incendio y talado) permite ver mejor los elementos, hemos marcado mejor las trincheras, identificado un total de cerca de 120 bocas de refugios, más restos de casetas, y otros dos nidos, así como numerosos restos de puestos de tiro.

Ahora, por el gran volumen de elementos y para la mejor descripción e identificación sobre el terreno, hemos procedido a sectorizar el conjunto en cinco áreas. Así pues describiremos cada sector con unas referencias de los elementos que contiene. Respecto a los refugios, principales elementos del presente trabajo, reiteramos que la gran mayoría están colmatados, siendo impenetrables; otros pequeños y medianos; y varios más de considerables medidas y complejidad, que serán descritos y acompañados de sus topografías realizadas.

En el mismo sentido clarificador, entre estas descripciones, presentamos un plano completo de la zona donde se han incluido los elementos bélicos de La Chana que ahora hemos trabajado, indicando las trincheras, principales zonas con sus refugios, y las marcas de los sectores.

Asimismo, después de todas las descripciones, incluimos otro plano elaborado de forma más técnica por “BCM Viver” y facilitado por Manolo Molina, que contiene la Posición del que hemos dado en nombrar como el Sector 4 de esta Reseña.

   1.- El sector de la Clapiza tiene dos zonas bien diferenciadas, la norte y la sur, salvando toda la zona alta del monte, puro terreno de “clapiza”, bien pedregoso y donde no hay restos de elemento alguno.

En la zona norte, justo donde acaba el suelo de caliza y pasa a terreno con predominancia de arcillas, se encuentran vestigios de una trinchera con al menos cuatro bocas de refugios, todos ellos colmatados. También hay un muro parapeto. Debía de haber más elementos, pero los cultivos los hicieron desaparecer.

En la zona sur, también ya en la capa de arcillas y entre viejos cultivos, se encuentran restos de casetas y ocho bocas de refugios, los cuales son pequeños o están cegados, salvo uno con dos bocas que todavía permite entrar, si bien su interior está ya casi colmatado. Este refugio es el numerado como R46-47, cuya topografía se adjunta y que viene a medir una longitud total de unos 10 metros, con un ancho de las galerías de 1 a 2 metros, y una altura interior de 0,70 a 1 metro, aunque hay un derrumbe que no permite pasar y que mide sólo 25 cm de alto.

Coordenadas R46: N39.92001 W0.62784   658 msnm   30 S 702733 4421573

   2.- En el Rincón de Puerta solo hemos visto dos pequeños refugios, en un talud de viejos cultivos que después fue zona de pinos, y ahora es zona arrasada por el incendio. Pudo haber más elementos, pero es un suelo arcilloso propenso a la erosión, y entre tanta afectación, debieron desaparecer.

   3.- El sector del Cuarto Royo presenta un estado muy degradado. Aunque la zona alta del monte, conocido como el Alto Royo, es zona pedregosa de “clapiza”, todas las laderas son muy arcillosas y presentan serios problemas de erosión. La zona fue cultivada antaño, luego poblada con pinos, y ahora, tras el incendio han sido talados los árboles quemados, trabajando con maquinaria en las laderas. Aun con ello, todavía se aprecian varios elementos bélicos: un par de trincheras, muy deterioradas, y tres refugios ya colmatados. Además en la cumbre hay un gran socavón que pensamos pudo ser un puesto de tiro para ametralladoras, y cerca otro más pequeño.

Coordenadas socavón Alto Royo: N39.92598 W0.63603   705 msnm   30 S 702016 4422218

   4.- El sector que cae hacia la carretera CV-2352 y Barranco de las Ramblillas, que era la línea del Frente, debió de presentar en su momento toda una continuidad de trincheras, pero actualmente y debido a los cultivos y pinares, solo presenta dos zonas separadas con elementos; el resto desapareció hace ya tiempo. Además existen problemas de erosión, pues aquí también se ha sometido a talado y arrastre de arbolado. 

En la primera de estas dos zonas, la que hay cerca del antiguo camino de la Chana,  encontramos varias trincheras entrelazadas, todas en mal estado. A lo largo de estas trincheras hay muchos restos de puestos de tiro, y también dos restos de nidos de ametralladoras. También hay numerosas bocas de refugios, (hemos contado al menos 20), casi todas ellas colmatadas, aunque hay uno mediano en el que todavía se puede entrar, eso sí, arrastrándose. Es el numerado como R66, con una longitud de unos 6 metros, una anchura de 1 metro y una altura de 0,4 a 1 metros.

Coordenadas R66: N39.92327 W0.62765   662 msnm   30 S 702740 4421935

Junto al mismo camino y cerca de un navajo de reciente construcción hay otro refugio también semicolmatado y otro nido, muy interesante, en relativo buen estado y algo escondido, con una boca posterior, ahora casi cegada. Se acompaña topografía. Hay un pequeño tramo de trinchera desde cerca de la boca posterior del refugio hacia el resto de refugios.

Coordenadas búnker camino Chana: N39.92295 W0.62659  660 msnm   30 S 702831 4421903

En la segunda zona de la ladera que cae hacia las Ramblillas, ya cerca del Cuarto Royo y junto a una zona de pinos todavía no talados, también encontramos varias trincheras entrelazadas y en mal estado, con varios restos de puestos de tiro y diversas bocas de refugios, (hemos contado al menos 16), casi todas ellas colmatadas. Hay dos en los que se puede entrar:

- Uno el numerado como R82-83, con dos bocas, si bien está casi colmatado y obliga a arrastrarse, con una parte intransitable. Mide un total de 9 metros, con una anchura de 1 a 2 metros, pero con una altura interior de 0,20 a 0,40 metros.

- Otro, el numerado como R58, se encuentra al final de una trinchera, y presenta dos bocas, una de ellas semitapada por un bloque caído. Mide un total de 8 metros, con una anchura de 1,5 a 3 metros y una altura interior de 1 a 1,50 metros.

De ambos se adjunta topografía.

Coordenadas R82: N39.92329 W0.63137   691 msnm    30 S 702422 4421929
Coordenadas R58: N39.92379 W0.63185   686 msnm   30 S 702379 4421984

 


   5.- El sector que hemos dado en llamar “Masía” abarca toda la zona cercana a esta construcción, siendo la parte que más refugios contiene, además de los más grandes e interesantes. En total hemos localizado un total de 67 bocas de refugios, de los cuales 10 tienen dimensiones considerables por lo que incluiremos detalle de su descripción y topografía.

Este entorno, que constituye la ladera recayente hacia el sur, es una zona con predominancia de arcillas y algunas pequeñas líneas de resaltes rocosos, presentando, como otras, un elevado grado de erosión. Algunas porciones de terreno llegaron a cultivarse, otras fueron plantadas con pinos; ahora todo está arrasado por el incendio, y entre las talas, la orientación y la sequía, presenta una regeneración muy escasa.

En cuanto a otros elementos bélicos, hay restos de tres trincheras, todas en mal estado, así como vestigios de varias casetas. La gran mayoría de los refugios se encuentran en un par de líneas al Noreste de la Masía, mientras que unos pocos están casi en la zona alta del monte, y también al Noroeste de la Masía.

Aparte de las numerosas bocas colmatadas, hay unos cuantos refugios de escasas dimensiones (alrededor de 1x1 o 1,50x1,50 metros), y otros pocos, como son los numerados con el 1, 2, 15, 16,17, 23, 40, 41, 42, 55 y 103, de dimensiones medias (salas de 2,50 a 3,50 metros de diámetro).

A continuación desarrollamos la descripción individualizada de los 10 refugios que antes hemos destacado por sus mayores dimensiones. Asimismo incluiremos sus respectivas topografías, junto con las de otros refugios importantes que también han sido descritos en el resto de sectores de esta Reseña de La Chana.
 
Refugio nº 7-8-11: Presenta tres bocas conectadas por una galería principal, con varias galerías perpendiculares, lo que supone una estructura general poco habitual. La suma de las galerías mide un total de 50 metros, siendo la anchura media de éstas de 1 a 1,50 metros. La altura va entre 1 y 1,30 metros. Las tres bocas son practicables, si bien la nº11 apenas mide 0,80x1,10 metros; algo más grande la nº7 con 1,20x1,30 metros, y la nº8 mide 1x1,20 metros. 

Coordenadas R7: N39.92195 W0.63379   673 msnm   30 S 702219 4421776

Refugio nº 10: Tiene una galería en zigzag, de un total de unos 7 metros de longitud, con un ancho de 0,90 a 1,50 metros, y una altura de 0,80 a 1,30 metros. La boca mide 0,80x0,90 metros. 

Coordenadas R10: N39.92214 W0.63357   679 msnm   30 S 702238 4421796

Refugio nº 12-13-14: Dispone de tres bocas con forma habitual en “W”, aunque en general está bastante colmatado. La suma de las galerías llega casi a 20 metros, con una anchura muy variable que llega hasta 3,50 metros, y una altura interior de 0,50 a 1,20 metros. Las bocas nº12 y nº13 son muy pequeñas (1x0,40 y 0,50x0,80 metros respectivamente), mientras que la nº14 mide 0,90x0,60 metros. 

Coordenadas R12: N39.92219 W0.63348   680 msnm   30 S 702244 4421803

Refugio nº 20-21: Con dos bocas guarda la habitual forma de “U”, estando bastante obstruido en su interior, lo que obliga a arrastrarse todo el rato. Las galerías miden un total de unos 10 metros, con una anchura de 1,50 a 2,50 metros, y una altura entre 0,50 y 1,30 metros. La boca nº20 apenas son 0,40x0,40 metros, mientras que la nº 21 tiene 1x1,20 metros. 

Coordenadas R20: N39.92219 W0.63279   678 msnm   30 S 702304 4421804

Refugio nº 24-25-26-27-28-29: Posee un total de 6 bocas y un considerable tamaño interior, que, junto al descrito nº7-8-11, es el más interesante de la zona. El total de las galerías mide unos 50 metros, siendo su estructura atípica y relativamente compleja; los anchos de éstas oscilan entre 0,80 y 2,50 metros, y la altura interior entre 0,50 y 1,50 metros. Todas las bocas son practicables, sacando una media 1x1 metros. 

Coordenadas R24: N39.92228 W0.63266   681 msnm   30 S 702314 4421814

Refugio nº 30-31-32: Con 3 bocas presenta la forma de “W”, estando bastante colmatado en su interior. Las galerías miden un total de unos 12 metros, siendo su anchura de 1 a 2,50 metros, y su altura máxima de 0,50 metros lo que hace muy penoso moverse por su interior. Las bocas nº30 y nº32 son muy pequeñas y están casi taponadas, mientras que la nº31 tiene 1,20x0,50 metros y es por la única que se puede entrar. 

Coordenadas R30: N39.92244 W0.63212   682 msnm   30 S 702361 4421833

Refugio nº 34-35: Presenta 2 bocas con la habitual forma de “U”, estando bastante obstruido en su interior, siendo una parte impracticable. Las galerías miden un total de unos 13 metros, con una anchura de 0,80 a 2 metros, y una altura entre 0,20 a 1 metro. La boca nº34, de 1x1,20 metros solo permite asomarse, pues pronto se colapsa, mientras que la nº35 mide 2x1 metros y permite entrar bien en la primera zona. 

Coordenadas R34: N39.92210 W0.63167   682 msnm   30 S 702399 4421796

Refugio nº 36: Ostenta una sola boca de 1,30x0,50 metros de acceso a una galería recta de 5 metros de longitud, 1,50 metros de ancha y 0,80 metros de alta. 

Coordenadas R36: N39.92174 W0.63144   680 msnm   30 S 702421 4421757

Refugio nº 54: Dispone de una única galería en forma de zig-zag, con una longitud de unos 7 metros, ancho medio de 1 metro y la altura de 0,50 a 1,30 metros. Su boca, parcialmente tapada, mide 1x0,40 metros. 

Coordenadas R54: N39.92292 W0.63263   686 msnm   30 S 702316 4421886

Refugio nº 103-104: En la típica forma de “U” con dos bocas, está bastante colmatado y obliga a arrastrarse. Sus galerías cuentan con un total de unos 12 metros, una anchura desde 0,80 a 1,30 metros, y una altura entre 0,40 y 0,80 metros. La boca nº103 mide 0,80x1,40 metros y la nº104, 0,80x0,40. 

Coordenadas R103: N39.92279 W0.63597   674 msnm   30 S 702030 4421863

Como hemos dicho, se adjuntan las topografías de los diez refugios descritos y otros.

 


Plano de posición del reseñado Sector 4 de La Chana, BCM


 
Documentado por Pepe Juesas y Paco Mas.
Colaboran: Ramón Juan y Manolo Molina.

 

Estado general de la zona tras el incendio y talado

 

Nido de ametralladoras del Camino de la Chana

Boca del refugio nº 7

Interior del refugio nº 7-11
  
Interior del refugio nº 10

Interior del refugio nº 12-14

Interior del refugio nº 20-21

Boca del refugio nº 23

Boca del refugio nº 24

Interior del refugio nº 24-29

Bocas de los refugios nº 27 y 28
Boca del refugio nº 35

Boca colmatada del refugio nº 57

Boca del refugio nº 58

Interior del refugio nº 58

Refugio nº 82, muy reducido ya, como puede verse

 

jueves, 16 de mayo de 2024

SIMAS DEL CORRAL DE MAYO, MONTE DE LA COSTALATA (VALL DE ALMONACID).


 
Fecha: abril de 2024.

Texto, topografías y fotografías: Paco Mas, Paco Muñoz, Ana Muñoz. GESAP.


En la senda que sube desde la partida de la Mojonada (zona linde de Navajas con Gaibiel y la Vall de Almonacid) hacia la cumbre del monte de la Costalata, también conocido en Navajas como el Cerro Pelao dada la deforestación que presenta, un poco antes de alcanzar la cumbre se pasa junto a los restos del Corral de Mayo. En este punto se abre hacia el Sur el barranco del Salvador.

Justo por encima de dicho barranco, y en paralelo al mismo pero por su margen izquierdo, se intuye una tenue línea de fracturas. A lo largo de toda esta discontinua línea se sitúan diversas grietas y simas, algunas cegadas y otras que permiten descender cierta profundidad. Todas ellas objeto del siguiente artículo.  

 

Zona de localización de las simas del Corral de Mayo y Costalata, remarcada en círculo negro, sobre mapa del IGN

En la otra ladera del monte de la Costalata así como en su misma cumbre se abren otras cavidades, entre las que destaca claramente la Sima de la Costalata, que es la más profunda y amplia de toda la zona, aunque no deja de ser una fractura. Se puede ver referencias de estas cavidades en el SICE (Sistema Informático de Catalogación Espeleológica de Castellón), en el siguiente enlace:

   http://www.cuevascastellon.uji.es/

Volviendo a la zona del margen izquierdo del Barranco del Salvador, por debajo del Corral de Mayo, en el SICE estaban reseñadas dos de estas simas, con la denominación de Simas del Corral de Mayo, las números 1 y 2. Que sepamos no tienen otro nombre propio. Hemos seguido pues esta denominación, de forma abreviada: SCM. La numeración se ha hecho respetando los dos primeros números, y poniendo el resto en dirección Norte-Sur. Se adjunta un croquis de situación de las mismas para su mejor interpretación.

Hasta el momento hemos datado 10 puntos de referencia. Las cavidades 1 y 2 ya fueron referenciadas de forma genérica en 2011 por espeleólogos del club Unión Ciclista las Palmas. Posteriormente algunas de ellas fueron exploradas en 2018 por miembros del GESAP (Xevi Bolumar, Guillem Nebot y Vanesa Gil), pero ha sido entre 2023 y 2024 cuando se han documentado al completo el conjunto de simas, participando otros miembros del GESAP (Paco Muñoz, Ana Muñoz, Rafa Juesas, Paco Mas, José Ángel Cobo).

Toda esta zona se desarrolla sobre calizas del Jurásico, con reducido espesor, según el IGME.

 

Zona de las simas del Corral de Mayo

Vistas de la Costalata desde la Mojonada

     


         
Rato de descanso y almuerzo en una de las jornadas de exploración

     
DESCRIPCIÓN DE LAS CAVIDADES

La descripción de las cavidades ha seguido el orden de localización Norte-Sur.


SCM 4-1. 30 S 715112 4420919   664 msnm   N39.91107 W0.48334

Es un agujero de momento impenetrable, que desciende en diagonal al menos unos 5 metros. En realidad este punto es el extremo superior de la fractura SCM 4-2.


SCM 4-2. 30 S 715115 4420909   662 msnm   N39.91098 W0.48331

Es una fractura cegada al completo por bloques, de unos 6 metros de larga, cuyo extremo más alto es el agujero SCM 4-1.

Boca de SCM 4-1

Fractura SCM 4-2

SCM 3. 30 S 715137 4420875   661 msnm   N39.91067 W0.48307
(Este punto es el extremo inferior).

Es una gran fractura también cegada, de unos 20 metros de larga y de 1 a 2 metros de ancha. En algún punto baja 3 metros, pero siempre es abierta.

 

Fractura SCM 3

SCM 1. 30 S 715207 4420779   660 msnm   N39.90979 W0.48228

Fractura de unos 5 metros de larga y de 1 metro de ancha, que baja unos 5 metros, y que luego por su interior continúa en dirección Sur, siendo bastante estrecha (0,5 a 0,8 metros de ancha de media). Hacia el final hay un desfonde más estrecho todavía, justo para colarse una persona por algunos pasos. Tras bajar unos 8 metros, la fractura continúa en ambos sentidos, pero su extrema estrechez la hace impracticable. Al otro lado del desfonde continúa todavía un poco, unos metros en suave ascenso y luego gira a la izquierda, donde un inestable caos de bloques impide progresar con seguridad. El techo se deja de ver en gran parte de la grieta.

El recorrido en planta es de 50 metros y su profundidad es de -35 metros.

Esta fractura estaba catalogada en el SICE como nº 1.

El final de esta fractura viene a coincidir en superficie con otra fractura, catalogada por nosotros como SCM 5, y reseñada a continuación.

 

Boca de SCM 1

                        
Interior de SCM 1

                                                                               
Interior de SCM 1

                                                                                     
Interior de SCM 1

      
SCM 5. 30 S 715226 4420741   660 msnm   N39.90944 W0.48206
(Este punto es la abertura superior).

Se trata de una fractura con dos aberturas superiores, y conectadas por debajo. La superior (5-1) mide 3 metros de larga, 4 metros de honda y 1,20 metros de ancha, mientras que la inferior (5-2) mide 3 metros de larga, 5 metros de honda y 1 metro de ancha. El conjunto mide unos 12 metros de largo en total.

 


                                                                              
Boca de SCM 5-1

                                                                                  
Boca de SCM 5-2

 
SCM 6. 30 S 715237 4420725   656 msnm   N39.90929 W0.48194
(Punto superior de la fractura).

Se trata de una gran línea de fractura, toda cegada, que baja 2 metros en algunos puntos y que mide unos 17 metros, orientada a 140º-320º. El punto superior es 6-1, y el inferior 6-2.

 

Fractura SCM 6

                                             
                                                                        
SCM 2. 30 S 715237 4420725   670 msnm    N39.90834 W0.48059
(Punto superior de la fractura).

Fractura interrumpida en la superficie por bloques empotrados y tramos cerrados. Tiene una boca principal de acceso (punto 2-1) de unos 5 metros de larga por la que se puede destrepar con cuidado unos 2,50 metros. Siguiendo por el exterior y tras una zona de bloques cegados tiene otra abertura instalada con un espit, un incómodo paso de 0,80 x 1 metros que desciende unos 7 metros; este es el punto catalogado en el SICE como sima nº 2, y por nosotros como punto 2-2. Siguiendo en superficie, tras unos bloques se puede encontrar un agujero escondido de 0,30 x 0,60 metros, que conecta por el interior con el conjunto; este punto es el numerado por nosotros como SCM 7, ya que en principio ignorábamos su conexión. Este agujero tiene unos bloques algo inestables, y no hemos forzado su paso, pero sí hemos conectado visualmente con la persona que entró por la boca principal.

Coordenadas de la boca SCM 7: 30 S 715362 4420604   665 msnm   N39.90817 W0.48052

Si destrepamos por la boca principal, vamos bajando con cuidado dos resaltes, hasta situarnos bajo la boca 2-2, que tiene el espit instalado. Tras un pequeño zigzag, hay un desfonde y la sima se estrecha. Con un seguro provisional, y bajando en diagonal para evitar el fondo sumamente estrecho, se alcanza una curva, siendo una zona algo más amplia. La fractura gira casi 90º a la izquierda, y continúa unos 10 metros, hasta cerrarse en una pared. El techo es alto (unos 12 metros en total), y ahí conecta con la ventana catalogada como SCM 7.

El recorrido en planta es de 27 metros y su profundidad es de unos 18 metros. 

Esta fractura estaba catalogada en el SICE como nº 2.

 


Inicio del destrepe por la boca principal de SCM 2

                                                                                 

Boca de SCM 2-2, instalada con un espit

Interior, zona final bajo boca SCM 7

                                                                                    
Boca de SCM 7

SCM 8. 30 S 715369 4420602   665 msnm   N39.90815 W0.48045

Es un indicio de fractura, totalmente cegada, aunque tiene una madriguera en un extremo. Mide unos 5 metros.


SCM 9. 30 S 715481 4420404    684 msnm   N39.90634 W0.47920


SCM 10. 30 S 715477 4420389    681 msnm   N39.90621 W0.47925

Son dos fracturas cercanas, separadas por unos 10 metros, que conectan en su interior, si bien el paso es muy estrecho e impracticable.

La sima SCM 9 es una fractura de unos 5 metros de larga y apenas 1 metro de ancha, algo escondida por el propio resalte de la roca. Tiene dos espits en la cabecera, uno a cada lado de la fractura. Tras una bajada de unos 5 metros en rampa quedamos encima de una repisa formada por bloques empotrados. Hacia el lado sur la sima baja pero es muy estrecha. Por el lado norte seguimos bajando desde un tercer espit, y al poco un cuarto espit evita un roce y nos permite descender al fondo de esta parte de la sima. Siguiendo hacia el norte podemos meternos por un paso que fue ensanchado en 2018. Esta angosta ventana (1 x 0,25 metros) nos permite acceder a una zona que sigue un poco estrechándose más y también baja unos metros más, aunque luego se ciñe más y no permite el paso, pero se ve el fondo de la sima, punto más profundo de la misma.

La profundidad total es de 22 metros, pero con un retal de cuerda de 20 metros es suficiente para alcanzar el primer nivel del suelo.

Si al llegar al suelo continuamos hacia el sur, podemos avanzar a pesar de la estrechez (0,40 a 0,50 metros) hasta el fondo de la fractura. Tras la zona de bloques empotrados veremos la luz de la boca, y casi al final, en la zona alta se aprecia la luz que entra desde la SCM 10. 

El recorrido de las galerías alcanza los 32 metros.

La sima SCM 10 es una fractura de unos 12 metros de larga y una anchura de 1 a 1,5 metros. Tiene un par de bloques empotrados. En la zona sur tiene un espit que se puede reforzar con un natural, pero este descenso tiene mucho rozamiento y no lo aconsejamos. Mejor es desde un natural bajar al bloque empotrado central, y de ahí con otro natural bajar al cercano fondo de la sima (unos 6 metros). Si caminamos un poco hacia el norte damos con la pequeña ventana que comunica con SCM 9, de 1 x 0,15 metros. En este  nivel hay restos de esqueletos de varias cabras u ovejas. Si avanzamos hacia el sur destrepamos unos pasos fáciles, aunque estrechos, y podemos llegar al fondo de la sima.

El recorrido en planta es de 14 metros y su profundidad es de 15 metros.
                                                                           

                                                                                
Boca algo escondida de SCM 9

                                                                                     
Interior de SCM 9
                                                                                     
Interior de SCM 9
                                                                                  
Interior de SCM 9
                                                                                     
Boca de SCM 10
                                                                                  
Restos de huesos en el fondo de SCM 10
                                                                                      
Fondo de la sima SCM 10
                                                                                       
Estrecha ventana que conecta SCM 10 - SCM 9